De regreso a la oficina
De regreso a la oficina
Animar con éxito a los trabajadores para que vuelvan a la oficina se basará en una mezcla proactiva de medidas de seguridad y salud. Pero ¿están preparadas las empresas para los cambios que se avecinan?
A medida que pase el tiempo, será cada vez más probable un regreso mayoritario a la oficina. Y, aunque pocos esperan que la ocupación en las oficinas vuelvan a los niveles previos a Covid, los empleados ya están empezando a pensar en el entorno al que quieren regresar.
A pesar de la caída prevista de empleados que trabajan desde la oficina, sólo el 14% de los europeos cree que su empresa va a necesitar menos espacio. Ello muestra la preocupación en torno a la seguridad continua, así como la adhesión a los protocolos de distanciamiento social.
Más de cuatro sobre cinco empleados (82%), consideran que su empresa necesita más o la misma cantidad de espacio de oficina para cuando la plantilla regrese en bloque. La mayor solicitud para ampliar el espacio en las oficionas es en Noruega, donde el 86% afirma específicamente que necesita entornos de trabajo más grandes.
Pero nuestros hallazgos revelan que el espacio no es la única preocupación para los empleados. La higiene es ahora una prioridad principal entre todos los trabajadores. Una buena ventilación, superficies fáciles de limpiar y un lugar de trabajo con áreas separadas de almacenamiento, preparación y alimentación, están entre las cinco características principales consideradas muy o bastante importantes para el regreso a la oficina.
En Finlandia, Noruega y España, una buena ventilación se considera una prioridad particular, mientras que los empleados del Reino Unido se decantaron por la ventilación y unas superficies fáciles de limpiar, como las características más importantes de cualquier nuevo espacio de oficina.
Estas conclusiones se ven reforzadas por los grandes cambios que los mismo trabajadores de toda Europa esperan ver cuando regresen a la oficina. Las mamparas o pantallas de plástico entre las mesas, es, con diferencia, la mayor expectativa. Y ello acompañado de una reorganización de los escritorios que permita el distanciamiento social y planes de limpieza adicionales. De hecho, los cinco principales cambios previstos están relacionados con la higiene y la prevención de virus, con una mayor capacidad de flujo de aire y con la introducción de superficies más higiénicas para completer el conjunto.
Y, aunque los empleados reconocen la magnitud de esta tarea, hay pruebas de que un número importante de empresas aún no han cogido al toro por los cuernos. Sólo un 30% de los empleados afirma que su compañía planea el rediseño de sus de oficinas de cara a los próximos 6-12 meses. En Noruega (21%), los Países Bajos (17%) y Finlandia (18%), las cifras son aún más bajas.